La nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados aprobada en abril de 2022, es la primera legislación sobre Economía Circular acreditada a nivel nacional en nuestro país, la cual persigue los objetivos pautados sobre política ambiental de la Unión Europea con el fin de disminuir y subsanar los impactos medioambientales de los residuos sobre el medio ambiente y el cambio climático.
Gracias a este cambio de paradigma hacia la sostenibilidad, uno de los puntos importantes de esta Ley establece la reutilización de los productos y prohíbe la destrucción de excedentes apoyándose en los orígenes de la Economía Circular, totalmente contraria al modelo económico lineal basado en «extraer, producir, consumir y desechar».
La Ley de Residuos indica que “queda prohibida la destrucción de excedentes no vendidos de productos no perecederos tales como textiles, juguetes, aparatos eléctricos, entre otros”. Esta práctica fomenta la economía circular y el hecho de dar una nueva vida a los bienes materiales, dado que los excedentes deberán destinarse primero a la reutilización y cuando esto no sea posible, a la preparación para el reciclado.
Prevención contra la generación de residuos
Para prevenir la reducción de residuos generados, la Ley 22 2011 de Residuos y Suelos Contaminados propone medidas que podrán adoptar las Administraciones, como:
- Fomentar el ecodiseño, y la fabricación y uso de productos eficientes, duraderos y fiables en términos de vida útil y obsolescencia programada.
- Fomentar la reutilización, reparación y actualización de los productos para que tengan una segunda vida útil.
- Reducir la generación de residuos en la producción industrial y promover la reincorporación en las cadenas de valor de materias, sustancias u objetos para los que se ha declarado el fin de condición de residuo.
- Disminuir la venta de productos a granel y el empleo de envases reutilizables, entre otros.
Siguiendo el marco de la nueva Ley, estas políticas y medidas en la gestión de residuos (destinadas a fomentar la preparación para la reutilización y el reciclado), tendrán un calendario y unos objetivos pautados: para el año 2025, se pretende conseguir una reducción del 13% respecto a los generados en 2010. En 2030, un 15% respecto a los generados en 2010.
La importancia de una correcta gestión de los residuos, su obligatoriedad de separación en origen y posterior recogida se hace más importante que nunca en este marco vigente. Además, también destaca el esfuerzo en las medidas de trazabilidad, mediante la obtención de la información sobre generación y gestión de los residuos.
Valorización de Residuos obtenidos de Destrucción
En nuestro afán de mantener una política medioambiental que logre la garantía de Residuo Zero (ZERO WASTE), trabajamos en los casos en los que no se pueda reutilizar o reciclar, la valorización de residuos.
Analizamos y promovemos la valorización y reciclado de los residuos, evitando la Destrucción, a través del aprovechamiento responsable, eficiente y sostenible de los residuos.